jueves, 23 de abril de 2009

Un poco de Marketing político


Como estamos en época de cierre de campaña y el domingo hay elecciones por que no subir algo de Marketing político.

Joseph Goebbels, Ministro de Propaganda de la Alemania Nazi e intimo amigo de Adolf Hitler, fue uno de los principales oradores del tercer Reich. Goebbels tenia un talento impresionante. LAS MASAS LO SEGUIAN, Y LE CREIAN.

Su función consistía en controlar todos los medios, la radio, televisión, cine, literatura, etc. Asímismo debía impedir que saliera a luz la información del exterior (muchas veces esto significaba ocultar la verdad). Era también el encargado de promocionar o hacer públicos los avisos del gobierno

Goebbels se unió al Partido Nazi en 1922. Pero fue recién en 1926 que lo nombraron Gauleiter de Berlín por sus dotes de orador. Se trasladó a Berlín ese mismo año por órdenes de Hitler para reorganizar su partido que para ese entonces sólo era de "nivel regional". Fue nombrado por Hitler jefe de propaganda del NSDAP en 1930 y cuando el führer asumió el gobierno en 1933, fue declarado ministro de propaganda e ilustración popular. Mediante la propaganda, Goebbels divinizó a Hitler, promovió el odio a lo extranjero, al comunismo y al judaísmo.

Usó mucho lo que hoy en día se conoce como el marketing social, ensalzando muchos sentimientos de orgullo, promoviendo odios y en numerosas ocasiones mintiendo y convenciendo de cosas muy alejadas de la realidad.

También tuvo otras técnicas y métodos, como el de hacer esperar al público alemán por las noticias en tiempos de victoria para crear un fuerte suspenso y lograr que, cuando recibieran las buenas nuevas, la alegría fuera más duradera.

Goebbels se le atribuye mucha parte de la propaganda moderna, entre ellos sus 11 principios:

1.Principio de simplificación y del enemigo único.
Adoptar una única idea, un único símbolo. Individualizar al adversario en un único enemigo.

2.Principio del método de contagio. Reunir diversos adversarios en una sola categoría o individuo. Los adversarios han de constituirse en suma individualizada.

3.Principio de la transposición. Cargar sobre el adversario los propios errores o defectos, respondiendo el ataque con el ataque. "Si no puedes negar las malas noticias, inventa otras que las distraigan".

4.Principio de la exageración y desfiguración.
Convertir cualquier anécdota, por pequeña que sea, en amenaza grave.

5.Principio de la vulgarización.
Toda propaganda debe ser popular, adaptando su nivel al menos inteligente de los individuos a los que va dirigida. Cuanto más grande sea la masa a convencer, más pequeño ha de ser el esfuerzo mental a realizar. La capacidad receptiva de las masas es limitada y su comprensión escasa; además, tienen gran facilidad para olvidar.

6.Principio de orquestación. La propaganda debe limitarse a un número pequeño de ideas y repetirlas incansablemente, presentarlas una y otra vez desde diferentes perspectivas, pero siempre convergiendo sobre el mismo concepto. Sin fisuras ni dudas. De aquí viene también la famosa frase: «Si una mentira se repite suficientemente, acaba por convertirse en verdad».

7.Principio de renovación.
Hay que emitir constantemente informaciones y argumentos nuevos a un ritmo tal que, cuando el adversario responda, el público esté ya interesado en otra cosa. Las respuestas del adversario nunca han de poder contrarrestar el nivel creciente de acusaciones.

8.Principio de la verosimilitud. Construir argumentos a partir de fuentes diversas, a través de los llamados globos sondas o de informaciones fragmentarias.

9.Principio de la silenciación.
Acallar las cuestiones sobre las que no se tienen argumentos y disimular las noticias que favorecen el adversario, también contraprogramando con la ayuda de medios de comunicación afines.

10.Principio de la transfusión. Por regla general, la propaganda opera siempre a partir de un sustrato preexistente, ya sea una mitología nacional o un complejo de odios y prejuicios tradicionales. Se trata de difundir argumentos que puedan arraigar en actitudes primitivas.

11.Principio de la unanimidad. Llegar a convencer a mucha gente de que piensa «como todo el mundo», creando una falsa impresión de unanimidad.

Bueno. Este post no busca inclinarme hacia ninguna campaña política de las que estamos viviendo hoy en dia, ¿pero acaso Vinicio Alvarado, Ministro de Comunicación de el presidente Refael Correa y también era el director de Campaña, está utilizando los mismos métodos de Joseph Goebbels?

«Si una mentira se repite suficientemente, acaba por convertirse en verdad»

LA PATRIA YA ES DE TODOS

ES TAN MENTIRA QUE LA GENTE CREE QUE ES VERDAD POR COMO LA REPITE.

Ahora veamos una comparación física entre Goebbels y Alvarado.


Imagen de http://ecuadorsincensura.blogspot.com

IGUAL DE FEOS SON.

MEDITEN SUS VOTOS.

THE DAY TRIPPER

1 comentario:

huevito dijo...

BUEN ARTICULO JAO!